© César San Millán
Inmerso en la vegetación del parque, el quiosco Río Florida está formado por tres pabellones; sobre estas líneas, una vista del conjunto desde el noroeste, con los cuerpos que albergan el bar –a la izquierda– y el restaurante –a la derecha–, conectados entre sí mediante una caja de vidrio a hueso en la que se localiza el acceso principal.
Varias piezas de madera conectadas con pletinas de acero galvanizado constituyen la base estructural del Río Florida, un conjunto de tres pabellones –destinados a restaurante, bar y terraza– situado en un pequeño parque de la capital alavesa. El esquematismo de la propuesta, que parte de una abstracta retícula tridimensional, y la elementalidad de la organización, dictada por una nítida geometría, resultan idóneos para llevar a cabo este ejercicio de prefabricación riguroso, cuyo planteamiento constructivo destila una clara vocación de permanencia.