© Patricia Almeida
Desde su experiencia como autor de escenografías Joćo Mendes Ribeiro se enfrenta con las actuaciones sobre edificios existentes con la certeza de que su intervención debe ser tan respetuosa que pudiera pasar por una arquitectura efímera, y es con el uso preferente de la madera como propone de una manera inteligente y muy plástica un nuevo uso a este espacio del siglo XVI.
Siguiendo el principio de mínima intervención se ha dejado visible la huella del paso del tiempo en el edificio y así se han mantenido los pilares de fundición, los cuales, sin pertenecer al edificio original, se habían incorporado a su historia.